El mundo entero observó uno de los casos más interesantes e intensos de rescate bajo tierra, donde un país, su gobierno y la ayuda internacional se pusieron en manifiesto para lograr la hazaña de salvar a 33 mineros. Todas las cadenas internacionales de televisión, radio, portales Web, prensa, recursos del Estado, capital humano de todas las tendencias ideológicas, trabajaron de la mano. Casi tres meses de comentarios, historias, análisis e inclusive un minero con dos mujeres, eran la noticia diaria. Ahora bien, estudiando el perfil de cada uno de los 33 mineros rescatados en Chile, observamos que antes de la tragedia ninguno figuraba en el mundo público, pero si eran luchadores de mejores condiciones laborales y de seguridad en las múltiples minas chilenas.
Luego del rescate, las condiciones personales de vida de los mineros cambiaron profundamente e inclusive sus compañeros lo ven como héroes, primero por haber resistido el encierro, y segundo porque el gobierno y las empresas privadas han mejorado los sistemas de seguridad de las minas y las condiciones laborales, ahora son más atractivas. Eso quiere decir, que la tragedia trajo beneficios. Actualmente en más de diez estados del país la situación de las lluvias se convirtió en una guerra de titanes y apariciones mediáticas, pero quedó claro que en donde todos los tres niveles de gobierno trabajaron unidos, se logró mayor capacidad resolutiva.
Los yukpas, que se encuentran en la circunvalación número uno, en los límites del Municipio Maracaibo y San Francisco, necesitan urgentemente ayuda gubernamental, no hay excusa para no atenderlos. De los recursos económicos destinados para la emergencia nacional deberían destinar recursos para atender a esas familias que están damnificadas de atención gubernamental, de salud, de condiciones de vida y de una gran orientación.
Me gustaría ver a Desarrollo Social de la Gobernación, Alcaldía de Maracaibo y San Francisco trabajando de la mano, a la Comisión de Pueblos Indígenas, a las instituciones de derechos humanos, sigamos el ejemplo de los chilenos y ayudemos a los yukpas de la uno y de la Sierra de Perijá.
Quiero manifestar mi reconocimiento a todas las personas e instituciones que han puesto lo mejor de si para ayudar a nuestro hermanos de la Guajira y el Sur del Lago, a todos los artistas que colaboraron en el evento del pasado sábado, medios de comunicación, animadores, locutores, periodistas, rescatistas, voluntarios y al pueblo del Zulia. Ojalá que se aprenda de lo ocurrido y no se olvide a tantas familias necesitadas y a los yukpas y pueblos indígenas.
Jesús Castillo Molleda (Profesor Universitario, Politólogo, Locutor)
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